En el artículo del mes pasado (ver: "La Astrología Védica ante la Ciencia") desarrollé los argumentos que rebaten las mas importantes objeciones que se han formulado desde la ciencia materialista occidental contemporánea de modo indiscriminado a toda forma de ejercicio Astrológico. Uno de los temas siempre presentes en este tipo de cuestionamientos, y con razón, es el problema de los gemelos y mellizos.
Con respecto a esto me ha tocado conocer un caso de mellizos, que bien puede servir como ejemplo a los efectos de demostrar el modo en que mediante la Astrología Védica se logran apreciar las diferencias en el acontecer de ambas Almas en su temporal paso por este plano. Los datos natales son totalmente confiables debido a que la madre que los trajo al mundo ejercía la astrología de modo habitual aplicando la misma a todos los órdenes de la vida. El parto, siendo totalmente normal, aconteció en el hogar como de costumbre por entonces, con una mínima intervención de una partera. Por motivos de discreción profesional omito dar los nombres de los nativos, refiriéndome a ellos simplemente como nacimiento femenino y masculino respectivamente.
A priori, como se puede observar no hay diferencias entre ambas Rasi Chakras. El Ascendente de la natividad femenina al nacer primero se ubica a 8° 17’ de Capricornio mientras que en la masculina ello ocurre a 9° 46’ del mismo signo, quedando establecida una diferencia de 1°29’. Esta pequeña variación produce una sensible variación del Ascendente en varias de las Vargas o esquemas divisionales. En el caso de la Luna hay apenas una diferencia de 0°03’ en su longitud eclíptica.
De acuerdo al relato de la madre los nacimientos tuvieron lugar en torno a las 09:45hs, existiendo entre ambos un tiempo de 5 a 10 minutos. Ante esto, como de costumbre, lo primero fue implementar el método de pre-rectificación basado en el Kunda (ver: "Corrección de la Hora Natal"), arribando a posteriori de los ajustes que impone la regla a los siguientes esquemas de D-81 (Navanavamsa).
Estos acusan una diferencia de seis minutos entre ambos nacimiento, tiempo coincidente aproximadamente con el relato materno. Si bien fueron examinadas las dos horas natales bajo direcciones relativas a específicos acontecimientos para cada nativo las mismas no produjeron una variación demasiado significativa respecto a lo obtenido por el primer método. Esto confirma una vez más la efectividad del método Kunda, a la vez que lo posiciona como uno de los mejores recursos técnicos al momento de rectificar nacimientos múltiples.
En la Navanavamsa (D-81) del tema femenino vemos como el Ascendente se ubica en Escorpio, mientras que en el masculino lo hace en Piscis. El predominio de elemento agua en el Ascendente, de acuerdo a Parashara, supone una impronta relativa a una cualificación que caracteriza la casta Brahmanica. Si bien en la Rasi Chakra el Ascendente se ubica en Capricornio, en la Navamsa ambos tienen el Ascendente en Piscis. Los dos se han dedicado y cultivado disciplinas afines con tal vibración quedando, luego de sus sesenta años, a cargo finalmente de una institución espiritualista.
Si queremos contrastar el curso de sus vidas profesionales se impone evaluar la carta Dasamsa (D-10) implementada exclusivamente para evaluar la actividad que caracterizará al nativo en la vida. La nativa se dedicó a la música desde pequeña, destacándose con el arpa. Tal es así que llegó con el tiempo a consagrarse como destacada integrante de la orquesta estable del teatro Colón. Su hermano, con mucho mas bajo perfil, cumplió funciones como administrativo en diversos ámbitos. Esto último está claramente indicado por ser Mercurio regente de la casa diez en D-10 al mismo tiempo que habita la misma en Rasi Chakra (D-1). Ello ocurre debido a que el Ascendente en D-10 se posiciona en Sagitario. En la D-10 de su hermana encontramos a éste en Escorpio, muy fortalecido por la presencia de Marte, su regente, en Trikona al Sol y Júpiter (exaltado en Cáncer) desde casa nueve, todos ellos en recíproca amistad. De por sí esto le confiere una fuerza al polo volitivo en el plano de la acción en el mundo que no se registra en la D-10 de su hermano. El Sol, junto a Venus, como cohabitante de la casa diez en D-1 y regente de la casa diez en D-10 se halla especialmente dignificado, dado que como regente de una casa kendra (angula) en D-10, como ya se ha dicho, se une en casa nueve con Júpiter, el regente de la casa cinco, una casa trikona (trigonal al Ascendente). En el nacimiento masculino no solamente vemos como esto en D-10 no se produce, sino que la casa diez se halla dañada por el aspecto de Saturno y Rahu desde casa cuatro. Ketu en casa diez indica la renuncia a las expectativas que la sociedad tiene sobre el individuo. Esto generalmente ocurre en pos de algún tipo de misión colectiva de carácter espiritual. Naturalmente que éste también indica allí los conflictos que el individuo debe enfrentar hasta dar con su misión de vida. En este sentido, el nativo se realiza a avanzada edad una vez que puede dedicarse de lleno a la dirección de la institución espiritualista de la que su madre fuera miembro fundador.
Por otra parte podemos ver como Venus en casa dos en D-10 de la nativa indica ingresos provenientes del arte. Mercurio en la casa dos en D-10 del nativo, ubicado en el “institucional Capricornio” supone ingresos por actividades ligadas a la administración, escritos, comunicación y/o docencia en un ámbito tradicional. Ambas situaciones aquí se cumplen. Ella fue música, él administrativo y director de una tradicional institución luego de jubilarse en el ámbito estatal. El brillo (Júpiter) sensible fue de ella, el deber ser en relación al mandato familiar (Saturno) ligado a lo institucional fue de él.
Bibliografía:
Kumar, Lt. Col. Raj: "Vargas, A Vedic Approach".
Sagar Publications, New Delhi.
Rath, Sanjay: "Varga Chakra".
Sagar Publications, New Delhi.
© 2012 Arq. Pablo M. Mauro
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